jueves, 8 de abril de 2010

MONEGROS 2010





Con motivo de la próxima llegada de Monegros 2010 os dejo un resumen de la historia de este festival.

FUENTE: www.mixside.com

Este festival nació como una fiesta organizada por los dueños de la famosa sala fragatina Florida 135, es decir, la familia Arnau, y los propios residentes de la discoteca, con el fin de disfrutar de la música electrónica, que tanto aman, en un paraje tan inconfundible como es el desierto monegrino, para diferenciarlo de las ya conocidas pistas de esa famosa, y acertada, simulación del Bronx que es la sala principal de la macro discoteca.

De esta forma, en 1993, se decide celebrar esta fiesta semi privada, en unos terrenos de poco más de 300 hectáreas, propiedad de la familia Arnau, situados en la localidad oscense de Candasnos, justo en la frontera entre las provincias de Zaragoza y Huesca, y a pocos kilómetros de la macro sala fragatina.

Se celebró en la madrugada de un domingo, tras cerrar Florida 135, y con un line up compuesto solo por los residentes de la sala por aquel entonces, capitaneados por Tito Ormo, y con unos pocos privilegiados como asistentes exclusivos al evento, que pudieron disfrutar de la música y el cálido ambiente del desierto hasta el comienzo de la tarde, en un paraje único y respirando aroma a rave, y que acababa con un almuerzo en toda regla.

Un año después, la Monegros Party, nombre que tuvo el evento en sus primeros años de vida, volvió a celebrarse, esta vez en viernes por la noche, con el fin de no interferir en la programación de Florida 135, ampliando el presupuesto y el número de asistentes, que alcanzaron el millar de personas, y sustituyendo las sardinas a la brasa del almuerzo, por la cena a base de carne de la zona. Sin embargo, en 1995 se prefirió no celebrar el evento, con el fin de preparar algo mucho mejor y mas espectacular, con un line up mas allá de los djs residentes de la sala, y coincidiendo con la subida del alza de la sala fragatina, que ya empezaba a convertirse en un autentico bastión para las grandes estrellas de la electrónica, y una meca para todos los amantes del clubbing de calidad, y eso es algo que debía encontrar su reflejo en el festival monegrino.

De esta forma, un año después el festival resurgió con fuerzas renovadas,



Continuamos repasando la historia de uno de nuestros más importantes festivales, el Monegros Desert Festival, que este año llega a su quinceavo aniversario, y desde mixside, queremos celebrarlo, haciendo un repaso a la increíble trayectoria de este evento.

En el artículo anterior, nos quedamos en 1996, cuando, tras un año de parón, el festival volvió a resurgir, con mas fuerza que nunca, y con unos cambios mas que notables, empezando por el propio nombre del evento, que pasó a denominarse Groove Parade, y siguiendo por la apertura al publico, previo pago de un precio simbolico como entrada, y con los primeros medios acreditados en orden a cubrir el evento.

Bajo la dirección artística de Advanced Music, los mismos artífices de ese gran evento que es Sonar, se consiguió llevar a cabo una magnífica velada, que se consolidó en 1997, con un mas que increíble line up, el mas espectacular hasta el momento, con los djs residentes, es decir Tito Ormo, Tony Verdi o Loe, como anfitriones, y grandes figuras invitadas, tanto nacionales como internacionales, que demostraban el carácter internacional de la cada vez mas afamada sala fragatina.

De esta forma, djs de la talla de Laurent Garnier, Gayle San, Tim Baker o los flamantes residentes mensuales de la sala, como John Acquaviva, Francesco Farfa o Funk D’Void, se convirtieron en las primeras grandes estrellas en dejar su impronta en el desierto, gracias a un evento que ese año, logró reunir a 2500 personas en las tierras de la familia Arnau, en una fiesta en la que la electrónica mas vanguardista se fundía con el rustico aroma de la carne a la brasa que se repartía entre los asistentes, y los modernos cubatas se alternaban con el vino extraído de unas tradicionales botas dispuestas para la ocasión.

Pero fue en 1998, cuando el festival se consolidó como uno de los mas grandes eventos del panorama nacional, aunando esa esencia rave del principio con los beneficios de un festival organizado, es decir, un ambiente familiar y a un módico precio, bastante asequible, en comparación con lo que el evento ofrecía

Con la marca Marlboro, como principal patrocinador, y con dos escenarios principales, uno mas techno, la famosa Open Air, y otro, ubicado en una carpa, y destinado a las tendencias mas houseras, ese año tuvimos el privilegio de ver por el desierto a grandes nombres de la escena techno y house, tanto nacional como internacional, como Carl Cox, Richie Hawtin, Ralph Lawson, An Der Beat, Teen Marcianas, además de los consabidos Francesco Farfa o Tony Verdi, entre otros, que hicieron bailar a los alrededor de 4500 asistentes que se congregaron en el desierto.

Este año también supuso la incorporación de un nuevo escenario, el pajar chill out, dedicado a los ritmos horizontales y habilitado a modo de reservado, para que la gente reposara de tanta fiesta, y, junto a este, en la famosa cabaña, se estableció otra zona, donde se repartía drum n bass y ritmos rotos, a diestro y siniestro, con el afamado dj dramero Fabio, como protagonista.


Un año después, en 1999, el festival repitió formula, de nuevo con la marca tabacalera como patrocinadora, y con una asistencia de publico impresionante. En esta ocasión se aumentó el numero de escenarios, con la inclusión de un escenario electrónico y se dio mas importancia al cartel dedicado al chill out, con la inclusión de grandes figuras del ambient y del chill house, como Mixmaster Morris o José Padilla, por aquel entonces anfitrión de las tardes del Café del Mar ibicenco.

Como cabezas de cartel indiscutible, de ese año, contábamos con la presencia de Sven Vath, Slam, Marco Carola, o grandes del house como Jim Masters o Cesar De Melero, además de los habituales Francesco Farfa, John Acquaviva , Fabio y, por supuesto, Tony Verdi. Por otro lado, la nueva carpa electrónica también se estreno por todo lo alto, con la presencia de Luke Slater, Angel Molina o Big Toxyc.

Este año se empezó a gestar la proyección internacional del festival, alcanzando la cifra de 6000 asistentes.Sin dudas, una nueva y brillante época había comenzado para este festival en mitad del desierto monegrino, y eso es algo que contaré en la siguiente parte de esta más que interesante historia.



Continuamos con el repaso a la historia del Monegros Desert Festival, y en nuestro último periplo temporal lo dejamos en 1999, aún como Groove Parade, y a punto de consolidarse como uno de los grandes festivales de música electrónica del país.

Ya entrados en el nuevo milenio, la edición del año 2000, es conocida como la de la tormenta de arena, ya que un fuerte viento, que se levantó a primeras horas de la noche, obligó a los djs que pinchaban en el Open Air, entre los que se encontraban los cabezas de cartel de ese año, como Jeff Mills, Derrick May o Terry Francis, a llevar a cabo sus sets en el interior de la cabaña, que mas tarde sería conocida como Beach Club.

Mucho mas del doble de asistentes que el año anterior, superando con creces las 13000 personas, bailaron al ritmo que imprimían djs de la talla de DJC1, Lulu, Angel Molina, José Luis Magoya, residente, por aquel entonces del viejo Row, además de los consabidos John Acquaviva, Francesco Farfa o Tony Verdi, que se sumaron a las estrellas anteriormente mencionadas, sumando un total de 38 artistas, repartidos en cuatro escenarios diferentes.

Tras este año, los cambios se sucedieron vertiginosamente, siendo el mas sustancial el cambio de día, pasando a celebrarse el sábado noche, y la nueva agencia de intermediación de artistas dejaba de ser Advanced Music, para caer en manos de Enter Group, dando lugar a una gran relación entre ella y la familia Arnau, que aún persiste hoy en día.

Un total de 47 artistas se dieron cita en la edición del 2001, incluyendo estrellas de la talla de Richie Hawtin, Tim Baker, Roger Sanchez, Matthew Herbert o Talvin Sigh, además de los habituales Farfa, Acquaviva, Verdi, etc., que fueron maestros de ceremonias de un evento que contó con un millar mas de asistentes más que en la edición anterior.

Fue en la octava edición del festival, la que tuvo lugar en 2002, y con la campaña antitabaquismo en pleno apogeo, cuando se decidió cambiar el patrocinador, que paso a ser San Miguel, al que acompañaban, en estas labores otras conocidas marcas de bebidas espirituosas como Bacardí o White Label, todas ellas con carpa propia, la Bacardí destinada a los ritmos mas houseros, y la White Label, a la electrónica mas variopinta.

Algo a destacar en esta edición fue la enorme importancia que se le dio al live, con las actuaciones de gente como Fangoria, Sidonie, Wagon Cookin o Jazzanova, y también será conocida esta edición como aquella en la que nuestro añorado Sideral pincharía con un brazo escayolado.

Además de estos artistas, el elenco del cartel se completaba con gente de la talla de Richie Hawtin, Stacey Pullen, Christian Smith, Slam, Mistress Barbara, Claudio Coccoluto, los habituales Farfa, Acquaviva, Molina o Verdi, y la presencia de auténticos monstruos del techno nacional, como Oscar Mulero o Cristian Varela, que solventaron, alguna que otra caída de cartel, como la de Derrick May, y consiguieron dar vida a ese nuevo escenario que era el Beach Club. Más de 18000 personas fueron testigos de este magno evento, y los autobuses que venían de más allá de nuestras fronteras aumentaron en un número considerable, con lo que la fama internacional del festival era más que patente.

Y llego uno de los años claves del festival, ya que la edición del 2003, destacó por ser la que experimento el mayor crecimiento, con la consiguiente sorpresa de la organización, que, ese año, se vio desbordada por una demanda mayor de la que se podían imaginar. No en vano, hablamos de 26000 personas en esa porción de desierto, algo que provocó enormes disturbios en la entrada del festival, y un caos bestial en las barras.

Puede que una de las razones de esta saturación, fue el gran color del cartel, con Jeff Mills, Laurent Garnier y Richie Hawtin a la cabeza, aunque lo que venía después no se quedaba atrás, como Carl Craig, con un set chill out, el avezado François K, la ya asidua Mistress Barbara, el sorprendente Vitalic, los acid heads Hardfloor, un cuasi desconocido Steve Bug, o exclusivas tan grandes como Andrew Weatherhall o LTJ Bukem, como cabeza de cartel de la parte drama, que dejaba de ser monopolizada por Fabio.

Pero lo más destacable de esta edición fue la incorporación de un nuevo estilo al cartel, y que aun forma parte del mismo, con su propia cabeza de cartel. Estoy hablando del hip hop, que este año se estrenó con la presencia de la flor y nata del rap nacional, como La Mala Rodríguez, Solo Los Solo, Violadores del Verso, Mucho Muchacho, etc., que junto a Weatherhall y los drameros, se encargaron de dar vida a la que se convertiría, durante unos años, en el segundo escenario principal, tras la Open Air, es decir, la famosa Carpa San Miguel.

Sin dudas, este gran año, hizo recapacitar a la organización y ver que la magnitud del evento estaba creciendo a pasos agigantados, y decidieron poner manos a la obra, para solucionar los problemas acaecidos por esa situación. Y vaya si lo hicieron, ya que un año después nada volvería a ser lo mismo, pero eso lo dejo para otra parte.



Seguimos repasando la historia de nuestra raverbena mas popular, el Monegros Desert Festival, y, si recordareis, la ultima vez nos quedamos con el sabor de boca que nos dejó la novena y exitosa, a la vez que desorganizada, edición que tuvo lugar en el 2003, y que llevó a la propia organización a replantearse la forma de llevar a cabo un festival que crecía de una forma tan vertiginosa y que cosechaba un éxito sin precedentes.

Y se aprovechó, que la edición del 2004 coincidía con el décimo aniversario del festival, para realizar los cambios mas drásticos de la historia del evento, comenzando por el mismísimo nombre, dejando de llamarse Groove Parade, para volver a los orígenes, denominándose Monegros Desert Festival, tal y como lo conocemos ahora.

Y el segundo, y revolucionario cambio, fue el de la aparición de una moneda única del festival, que hasta ahora operaba como otros festivales con enorme solera como Sonar o FIB, es decir, había que comprar vales, en las taquillas habilitadas especialmente para este menester, según lo que fueras a consumir, y luego canjearlos por las consumiciones en la barra. Pero el año anterior, y debido sobre todo al enorme colapso que se produjo en las taquillas, de decidió por adoptar una moneda única, el monegrino, equivalente a un euro, y que consiguió agilizar el tramite del pago en las barras y hacerlo mucho mas cómodo, tanto para el publico como para los propios camareros, y, además supuso la aparición de un nuevo souvenir, ya que fueron muchos los que conservaron una de estas curiosas monedas como recuerdo del festival, algo que ya se convertiría en tradición en años venideros.

Por otro lado, la organización aprendió de los errores de la edición anterior, y este año aumentó el número de entradas, y haciéndolo todo de forma más escalonada y organizada, con lo que los problemas que acusó el evento en 2003, desaparecieron totalmente, quedando este año como uno de los que mejor organizado estuvo.

Respecto al cartel de este décimo aniversario, hay que destacar que fue uno de los más variados y coloridos de toda la historia del festival, con permiso del que tuvo lugar un año después, algo conseguido sobre todo, gracias a la incorporación de nuevos escenarios, como el patrocinado por la marca de whisky White Label, que ayudaron a aumentar el numero de artistas presentes en el festival.

Y es que la cantidad de nombres de primer nivel que se dieron cita era impresionante, con cabezas de cartel de la talla de los belgas Front 242, que hicieron recordar los primeros tiempos de Florida 135, o djs como Kevin Saunderson, Dave Clarke, que tuvo doble actuación, con live y set electro al modo del que hizo para la serie de X Mixes, Richie Hawtin, Stacey Pullen, Slam, Miss Kittin, que empezaba a darse a conocer en solitario, tras dejar en stand by su proyecto con The Hacker, así como sets a cuatro manos, a cargo de Ben Sims y Mark Broom por un lado y Umek y Kanzyani, por otro, y primeras figuras de la talla de Adam Beyer, Marco Carola, DJ Rush, Michael Mayer, Oxia, Mistress Barbara, Christian Smith, Cristian Vogel, Superpitcher o Fixmer & McArthy, entre muchos otros, así como figuras nacionales de primer nivel de la talla de Oscar Mulero, Cristian Varela, Angel Molina, HD Substance, Tony Verdi o José Luis Magoya. También estaba programado un set del malogrado Sideral, pero su caída de cartel provocó que fuera sustituido por los British Morder Boys, el proyecto Birmingham integrado por Surgeon y Regis.

Este año también tuvo una importancia inusitada el house, con estrellas de ayer y de hoy, como Masters At Work, con Little Louie Vega haciendo doblete con su proyecto Elements Of Life, Tod Terry, Deep Dish, Silicon Soul, Swayzak o Ricardo Villalobos, entre otros.

Estilos como el hip hop y el drum and bass también ocuparon un lugar precedente, el primero con la presencia de uno de los padres del estilo, el gran Grandmaster Flash, además del acompañamiento de grandes figuras del rap nacional y el segundo, con la presencia del rey del jungle, el simpar Goldie, que vino en formato dj y acompañado de Mcs. Pero también hubo lugar para el dub, de mano de Mad Professor, el illbient, con su máximo representante, DJ Spooky o el trip hop, con DJ Vadim.

El éxito de este año fue total, casi 40000 personas bailaron al son de los ritmos del desierto, y eso, unido a una organización perfecta y unos cambios que no hicieron sino agilizar el evento, contribuyeron a ofrecernos el que fue uno de los años que mejor sabor de boca dejó a los asistentes.

Y un listón tan alto parecía difícil de superar, pero la edición del 2005 consiguió eso, y con creces, y es que esa fue la edición de los records, ya que fue la que mas artistas congregó y la que mas publico atrajo de toda su historia, superando, con creces, los cincuenta mil asistentes.

El increíble cartel volvía a apostar por la variedad de estilos, con un line up dispuesto a satisfacer todos los gustos, teniendo como cabezas de cartel a la formación hip hopera de Los Angeles, Cypress Hill y al elegante proyecto Thievery Corporation, así como la presencia de djs de la talla de Jeff Mills, Sven Vath, Richie Hawtin, Dave Clarke, Christian Smith, Pascal FEOS, Ben Sims, Marco Carola, Mistress Barbara, François K o Vitalic, entre otras estrellas internacionales, o nombres como Oscar Mulero, Cristian Varela bajo su alias mas tech housero Carlos Durán, D’Wachman, Jaumetic o el dj maño Carlos Hollers.

También hubo lugar para propuestas tan interesantes como Phuture 303, Octave One, James Holden, Nathan Fake, Zombie Nation, Alexander Kowalski, Der Dritte Raum, Matthew Jonson, tanto como dj como con su proyecto Cobblestone Jazz, Gucci Soundsystem, así como los warpianos Plaid, las irreverentes Chicks On Speed, el siempre elegante Dave Holmes, el trip hop de Howie B o el drum and bass de Photek, entre muchas otras sorpresas.

Un año más, el house volvio a tener un lugar predominante en el cartel del festival, con la presencia de primeras figuras de este estilo como Felix Da Housecat, Lil’ Louis, Ron Trent, Behrouz, el proyecto galo Superdiscount, integrado por Ettienne De Crecy, Alex Gopher y Julien Defauld o los nacionales Chus & Ceballos, con su Stereo Sound. Y se empezó a dar cierta importancia a la corriente mas dura del techno, representada por DJ Rush y los brasileños Pet Duo.

Sin dudas, estos dos primeros años como Monegros Desert Festival pueden ser considerados como los mejores de la historia del festival, tanto a nivel organizativo, como de público y, por supuesto, con unos careteles impresionantes, no superados hasta la fecha. En el siguiente repaso a la historia del festival, pondremos punto y final a esta interesante andadura.


Seguimos repasando la historia de ese macro evento que es Monegros Desert Festival, y entramos ya en los últimos años antes de llegar a este quince aniversario, que hemos aprovechado para contar la increíble evolución de uno de los eventos más multitudinarios y festivos de España, e incluso de Europa.

La ultima vez nos quedamos en la edición de los records, la del 2005, que no solo destaco por ser la que mas publico y artistas congregó, sino por la expectación que levantó el hecho de que ese mismo año, el festival vería, por primera, pero no por ultima vez, una edición de invierno, que, bajo el nombre de M2, tendría lugar en el mismo espacio donde se celebraba la edición estival, aunque con una menor duración y menor numero de escenarios.

La filosofía de ese festival era la de congregar a artistas mas alejados de la veta dura y apostar por sonidos mas experimentales, para lo que contaron con la presencia de gente como Aphex Twin, en formato dj bajo su alías AFX, o su compañero de sello, el inclasificable, y siempre sorprendente Jamie Lidell, así como de increíbles directos como el de Ladytron, Black Strobe, Mike Paradinas con su proyecto Qzip, o los Front 242, que aún tenían reciente su visita en 2004, aunque la guinda la puso el impagable live set de Rex The Dog, sin dudas uno de los momentos mas divertidos y recordados del festival. Aunque los sets de djs de calidad tampoco se dejaron atrás, con la presencia de Luke Slater, el ex Shamen Mr.C, Speedy J & Chris Liebing, con su proyecto Collabs, Mistress Barbara u Oscar Mulero, que pusieron la dosis hard justa y necesaria para un festival de esas características. Aunque resulto un evento perfecto y sin contratiempos, hubo algunos nubarrones, como la cancelación del concierto de Underworld, que no terminaron a tiempo su gira americana, o la caída, a ultimísima hora, de Miss Kittin, por problemas de salud, y que se vio sustituida, en última instancia por Mikel Teba.

Gracias a esta curiosa iniciativa, la espera para la edición del 2006, se hizo mas corta, una edición que, de nuevo llegaba con novedades, y novedades bastante importantes como la inclusión del nuevo escenario Gigante, que dejaba pequeña a la Open Air y a la Carpa San Miguel, hasta ahora los reyes del desierto, y que serviría para albergar a las grandes figuras que ese año iban a pasar por el desierto, entre las que estaban el dj Carl Cox o la formación The Prodigy.

Además de estas dos increíbles cabezas de cartel, este se completaba con la presencia de figuras de primer orden como Alexander Kowalski, Technasia, Luke Slater en formato live, Joris Voorn, Luomo, The Crystal Method, Black Strobe, Dave Angel, Adam Beyer, Terence Fixmer, Hardfloor, James Ruskin, Matthew Dear o, sobre todo, el live de B12 y el concierto de Nitzer Ebb, y también hubo cabida para habituales como Dave Clarke, Christian Smith, Ben Sims, Umek, DJ Rush, Pet Duo, Cristian Varela & Marco Bailey o Richie Hawtin que, esta vez, vino acompañado de la plana mayor de M_nus, con Madga, Marc Houle o Troy Pierce. También cabe destacar el showcase de Kompakt, con Gui Boratto, Matias Aguayo o Kaito, entre otros, así como la importancia que ese año tuvo el techno de Detroit con la presencia de Los Hermanos y Galaxy 2 Galaxy.

El house también tuvo un papel relevante en esta edición, de manos de Danny Tenaglia, con un set de casi siete horas, así como los Deep Dish, Ralph Lawson y su proyecto 2020 Soundsystem o toda la tropa Stereo, con DJ Chus y Ceballos a la cabeza. Y en cuanto al hip hop, junto a las grandes figuras nacionales, tuvimos el honor de tener en el desierto a Method Man, miembro de los Wu Tang Clan, y a Redman.

Sin embargo ese año, sería recordado por el del diluvio, ya que una inesperada, y mastodóntica, tormenta, provoco una autentica hecatombe, tirando una torreta de luz en los inicios del festival, con el consecuente corte de electricidad en los dos escenarios al aire libre y trastocó los horarios y el planning de muchos de los asistentes. Pero eso no supuso un obstáculo para que la gente se divirtiera bajo la lluvia o persiguiendo las sombrillas que despegaban en la oscuridad, elevadas por unos vientos huracanados.

kraftwerk-en-m2-zgzTras esta accidentada edición, a la que asistió un número menor de asistentes que a la del 2005, se decidió preparar un nuevo M2, pero viendo la impredecibilidad climática del desierto, la organización decidió llevarlo a la cercana capital maña, concretamente a la Feria de Muestras de la ciudad, entre las quejas de unos, y la alegría de otros, entre los que me incluyo, sobre todo al conocer que el cabeza de cartel sería, nada mas y nada menos, que los alemanes Kraftwerk.

Pero el resto del cartel era de autentico lujo, con la presencia de artistas de la talla de LFO, el rapero actor Ice Cube, como cabeza de cartel de hip hop, The Chemical Brothers, en formato dj, y los sets tanto en solitario como a cuatro manos, de Derrick May y François K. Además de estos, también contamos con una doble actuación de Ken Ishii, demostrando sus facetas como dj y como productor, esta ultima a través de un exclusivo live de ambient, el live de Donnacha Costello o los sets de Tiefschwarz, Oscar Mulero, Miss Kittin o DJ Hell. Y por supuesto, no podían faltar las grandes figuras locales, muy bien representadas por Violadores Del Verso, JLF o los Digital Analog Band, proyecto auspiciado por el propio Café del Mar.

Tras este genial evento, de gran éxito y repleto de una calidad indiscutible, tan solo mermada durante la etílica actuación de los hermanos químicos, se empezó a gestar la edición del 2007 del festival veraniego, que aunque era la decimotercera, se decidió bautizar como 777, por razones mas supersticiosas que otra cosa, parecía como si el hecho de decir Monegros Desert Festival 13, fuera a ser causa de los peores desastres, incluso peor que la tormenta de la edición anterior.

Para justificar esta nueva nomenclatura se decidió adelantar la fecha al sábado 7 de Julio, con lo que la jugada salía redonda (7 del 7 del 07), y la verdad es que la magia tuvo su efecto, ya que salió un festival íncreible y sin contratiempos.

Como primera gran confirmación, tuvimos la de Underworld, que venían al desierto, a resarcirse del plantón que dieron al primer M2, y que ya figuraban como auténticos cabezas de cartel de un año que prometía ser un autentico lujo, con el escenario gigante patrociando por el Ayuntamiento de Zaragoza y renombrado como escenario Expo 2008, ya que el famoso certamen estaba a la vuelta de la esquina. Por otro lado, la Open Air, pasó a denominarse escenario Sensheiser, ya que la famosa marca de electrónica se encargó de patrocinar este emplazamiento.

A este primer nombre se sumaron el de la formación Motor, el de otro rapero actor, como es Snopp Dogg, o el de ilustres proyectos como Model 500, The Black Dog, Asian Dub Foundation, Autechre, The Orb o Scan 7, lo que sumado a la presencia de djs de la talla de Dominik Eulberg, Tiefschwarz, Kenny Larkin, DJ Hell, Michel de Hey, Sven Vath, Richie Hawtin, Oscar Mulero como Dr Smoke, Ben Sims & Surgeon como Frecuency 7, Joris Voorn, Marco Carola, Umek, Steve Rachmad, Dave Clarke, Slam o, sobre todo, los Hi Tech Soul, es decir, Kevin Saunderson, Stacey Pullen y Jim Masters, conformaron un line up de lo mas impresionante, cuyos únicos peros fueron la practica ausencia de house, tan solo representado por el buen hacer de gente como Derrick Carter o los Silicone Soul, y la inclusión de una nueva carpa, la Apokaliptika, destinada al schranz y los ritmos mas duros.

Sin embargo, eran los primeros tiempos de la actual crisis económica, y eso, junto a la negativa de la organización de no celebrar el cuasi consolidado M2 en el recinto ferial de Zaragoza, por los problemas de sonido de dichas instalaciones, llevó a la suspensión del mismo.

Sin embargo, los seguidores del festival nos vimos recompensados, en cierta manera, durante las fiestas del Pilar de ese año, cuando la organización del festival habilitó unas carpas en el barrio zaragozano de Valdespartera, que fueron aprovechadas para celebrar un mini M2, que tenía lugar en dos jornadas, una dedicada al hip hop y los ritmos urbanos, aunque también tuvo lugar un live de Laurent Garnier, y la otra mas cercana al festival que todos conocemos, y que contó con la presencia de nombres como Front 242, Richie Hawtin, Derrick May, Magda, Marc Houle, Oscar Mulero o un exclusivo set de Miguel Mendoza, homenajeando a los sonidos de la Ruta del Bakalao. No se olvidaron de los grandes djs locales, como Chelis o Carlos Hollers, que hicieron una enorme labor en cabina.

Dichas carpas fueron aprovechadas por el Ayuntamiento de Zaragoza para albergar otros espectáculos como el FIZ, con Travis, Fangoria o Ladytron DJs, entre otros, o el concierto de Pet Shop Boys, con lo que estas carpas se convirtieron en la mejor alternativa de los pilares de ese 2007.

Tras este año, y ya en plena expo y con la crisis en primera plana, tuvo lugar la edición del 2008 de este veterano festival, pero en esta ocasión, Mixside fue uno de los medios acreditados, por lo que me ahorro el comentar lo que tuvo lugar en esta increíble velada, algo que podéis leer en este artículo, aunque ya os adelanto que ni la crisis, ni la estampida del Ayuntamiento como patrocinador oficial, impidieron que este año el evento fuera todo un éxito y nos dejara con un muy buen sabor de boca a mas de uno.

Ahora solo nos queda esperar que nos depara el festival en este quince aniversario, y que la saga continúe durante muchos años mas, aunque tras pasar una crisis como la que tenemos encima, lidiar con los rumores de su extinción por la posible construcción de un Las Vegas en plenos Monegros o evitar la explosión de la burbuja festivalera, creo que tenemos Monegros Desert Festival para rato.

Aquí os dejo algunas sesiones del ultimo año, como siempre si alguien tiene algún enlace más que no dude en ponerlo.


OSCAR DE RIVERA

PET DUO

ETO and GAB aka MOTOMORFOSES


LUKAS vs FERNANDA MARTINS


DJ MURPHY

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